OTISBURGSupergirl Alicia y Superman Dexter en el País de la Maravillas
Buscando rescatar espacios informales de lectura, he creado la ciudad de OTISBURGO: "A little bitty place" virtual para la expresión lúdica e informal de las tertulias literarias, a través de un encuentro creativo y dinámico con la ciencia, el arte y la cultura.
La oportunidad está aquí para todos los lectores que decidan convertir algunos momentos semanales en una opción para la expresión creativa del tiempo libre. Los que han visitado Bibliotecas como El Tintal, Virgilio Barco y El Tunal, en Bogotá o EL PARQUE CULTURAL DEL CARIBE en Barranquilla, sabrán del impacto social que las bibliotecas públicas y otros espacios, específicamente los virtuales, pueden producir al disminuir el analfabetismo cultural y eliminar la exclusión social tan común en la actualidad.
Otra de las motivaciones para fundar OTISBURGO es incentivar en los niños y niñas la lectura de los textos documentales y científicos, al igual que la conformación de clubes de ASTRONOMÍA; estas opciones se convierte en retos pues la promoción de la lectura en los colegios y bibliotecas es marcadamente literaria; erróneamente la exclusividad del desarrollo de las competencias en lectura y escritura corresponden a los docentes de Castellano y Literatura; esto trae como consecuencia que la lectura y escritura de temas científicos sólo interesen a quienes van a ser científicos o ingenieros.
Los niños, las niñas y los adultos, que visiten esta bitácora tendrán la oportunidad de poner a prueba su gran capacidad de asombro, curiosidad natural y amor por la lectura mediante el encuentro con una ciencia divertida: LA ASTRONOMÍA.
A partir del mes de enero de 2009, será normal encontrarse en cualquier lugar de OTISBURGO con un grupo de niños y jóvenes, dentro de los archivos, buscando respuestas a las preguntas relacionadas con el origen del universo y todo lo que en él existe. Los talleres de astronomía serán una convocatoria para que el público infantil y juvenil, alrededor de la lectura de los eventos astronómicos, recree literaria y científicamente los mitos y curiosidades de los astros.
En este espacio, de la mano de El Principito, de Antoine de Éxupêry, se viajará por galaxias, nebulosas, estrellas, constelaciones, planetas, satélites naturales. Será normal ver a Alicia de la mano de Dexter, a Mafalda charlando con Jimmy Newtron o a Hansel y Gretel descubriendo que la Vía Láctea sabe mejor con un trozo de la casita de chocolate.
Otisburgo se dispone como un espacio ameno para la lectura interdisciplinaria de la ASTRONOMÍA, ciencia maravillosa y apasionante, tan cercana la ficción, que podemos leerla y vivirla al igual que los relatos de aventuras y las novelas.
Recórcholis, Lex, esta vez sólo depende de mí que OTIS tenga su OTISBURGO.
Buscando rescatar espacios informales de lectura, he creado la ciudad de OTISBURGO: "A little bitty place" virtual para la expresión lúdica e informal de las tertulias literarias, a través de un encuentro creativo y dinámico con la ciencia, el arte y la cultura.
La oportunidad está aquí para todos los lectores que decidan convertir algunos momentos semanales en una opción para la expresión creativa del tiempo libre. Los que han visitado Bibliotecas como El Tintal, Virgilio Barco y El Tunal, en Bogotá o EL PARQUE CULTURAL DEL CARIBE en Barranquilla, sabrán del impacto social que las bibliotecas públicas y otros espacios, específicamente los virtuales, pueden producir al disminuir el analfabetismo cultural y eliminar la exclusión social tan común en la actualidad.
Otra de las motivaciones para fundar OTISBURGO es incentivar en los niños y niñas la lectura de los textos documentales y científicos, al igual que la conformación de clubes de ASTRONOMÍA; estas opciones se convierte en retos pues la promoción de la lectura en los colegios y bibliotecas es marcadamente literaria; erróneamente la exclusividad del desarrollo de las competencias en lectura y escritura corresponden a los docentes de Castellano y Literatura; esto trae como consecuencia que la lectura y escritura de temas científicos sólo interesen a quienes van a ser científicos o ingenieros.
Los niños, las niñas y los adultos, que visiten esta bitácora tendrán la oportunidad de poner a prueba su gran capacidad de asombro, curiosidad natural y amor por la lectura mediante el encuentro con una ciencia divertida: LA ASTRONOMÍA.
A partir del mes de enero de 2009, será normal encontrarse en cualquier lugar de OTISBURGO con un grupo de niños y jóvenes, dentro de los archivos, buscando respuestas a las preguntas relacionadas con el origen del universo y todo lo que en él existe. Los talleres de astronomía serán una convocatoria para que el público infantil y juvenil, alrededor de la lectura de los eventos astronómicos, recree literaria y científicamente los mitos y curiosidades de los astros.
En este espacio, de la mano de El Principito, de Antoine de Éxupêry, se viajará por galaxias, nebulosas, estrellas, constelaciones, planetas, satélites naturales. Será normal ver a Alicia de la mano de Dexter, a Mafalda charlando con Jimmy Newtron o a Hansel y Gretel descubriendo que la Vía Láctea sabe mejor con un trozo de la casita de chocolate.
Otisburgo se dispone como un espacio ameno para la lectura interdisciplinaria de la ASTRONOMÍA, ciencia maravillosa y apasionante, tan cercana la ficción, que podemos leerla y vivirla al igual que los relatos de aventuras y las novelas.
Recórcholis, Lex, esta vez sólo depende de mí que OTIS tenga su OTISBURGO.
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